Las llamas consumieron una vez más los históricos edificios de la capital británica cuando una réplica de madera del Londres del siglo XVII ardió para conmemorar el 350 aniversario del gran incendio que devastó la ciudad.
El gran fuego comenzó en una panadería en Pudding Lane a primera hora del 2 de septiembre de 1666 y se extendió rápidamente por las estructuras de madera de la antigua ciudad.
Duró cuatro días, devastando partes de la urbe dentro de la antigua muralla romana, pero sorprendentemente, sólo seis personas murieron.
La antigua y medieval catedral de St Paul quedó totalmente destruida y luego fue reconstruida en su forma actual siguiendo los diseños del arquitecto Christopher Wren.
La maqueta de madera fue diseñada por el artista estadounidense David Best y construida por jóvenes londinenses sin empleo durante varios meses.
El espectáculo fue el punto final de un festival de cuatro días que conmemoró el aniversario del fuego.