Advirtieron que "el record de incautaciones realizadas en los últimos años no se tradujo en una disminución del consumo de estupefacientes" por lo que planteó un nuevo paradigma.
La Argentina es el país de América en el que más se incrementó el consumo de cocaína, al tiempo que bajó la edad en que los chicos prueban las bebidas alcohólicas y el éxtasis, una situación que alertaron desde la Defensoría del Pueblo bonaerense, desde donde apuntaron que esto obedece a recortes presupuestarios en áreas clave.
Así lo reveló Walter Martello, defensor del Pueblo bonaerense adjunto durante la jornada "El Futuro de la Política sobre Drogas en la Argentina", en donde reveló que "en comparación con el año 2010, se triplicó el consumo alguna vez en la vida de cocaína entre adolescentes, de acuerdo a datos de la Sedronar".
Para colmo, relató que la Argentina "ocupa el tercer lugar entre los países de América con mayor consumo de cocaína y es donde más aumentó la prevalencia de su uso entre 2010 y 2017, con un 129%", mientras advirtió que "la edad de inicio en el consumo de alcohol se ubica en los 11 años y la de consumo de éxtasis pasó en la última década de los 16 a 14 años, mientras que su uso creció un 200% en ese lapso".
Asimismo, Martello expresó que "el inicio en el consumo sin prescripción médica de tranquilizantes se ubica cercano a los 25 años con una tasa de consumo reciente del 0,7 %, algo superior entre las mujeres y entre los adultos de 25 a 34 años (0,9 % y 1,4% respectivamente)".
"El récord de incautaciones realizadas por las fuerzas de seguridad en los últimos años no se tradujo en una disminución del consumo de estupefacientes. Atacar sólo la oferta de droga no alcanza. Tenemos que ir hacia un nuevo paradigma y establecer un programa integral, que ponga el esfuerzo en atacar los circuitos de financiamiento y lavado de dinero de las organizaciones narcocriminales y que al mismo tiempo apunte a reducir la demanda mediante la prevención y extrañamiento de las adicciones. Son dos caras de una misma moneda", expresó el defensor del Pueblo bonaerense adjunto.
Y resaltó: "Ante este panorama, realmente cuesta entender cuál es el motivo por el cual no se extendió el estado de emergencia que había decretado el presidente Macri y que venció en diciembre de 2018, sin que siquiera haya adherido la provincia de Buenos Aires".
En tal sentido, explicó que lo que resulta aún más preocupante, es que se mantenga el recorte sobre el presupuesto de la Sedronar, organismo que tiene a su cargo el desarrollo de las políticas integrales para el tratamiento y prevención de las adicciones.
Martello remarcó además que es necesario "declarar la emergencia en todo el país para dotar de recursos al sistema de prevención y tratamiento. A la vez, configurar una nueva política de Estado que incluya el fortalecimiento y creación de nuevos dispositivos".
Desde la Defensoría propusieron una serie de pautas entre las que figuran: "Desarrollar los Tribunales de Tratamiento de Drogas para que aquellas personas adictas, que hayan cometido delitos menores, realicen tratamientos de rehabilitación a cambio de la extinción de la pena; revisar la Ley de Estupefacientes y la Desfederalización Parcial de la competencia penal en materia de estupefacientes".