Hay momentos de la vida que marcan a fuego a las personas. Situaciones delicadas e impactantes, que obligan a cambios. A Marcos Escudero Besana, la pérdida de su abuelo materno Norberto, cuando asomaba como una joven promesa de Sarmiento de Junín, lo llevó a dejar repentinamente el fútbol y a calzarse los guantes de boxeo. "No tenía sentido seguir en el fútbol sin la presencia de él. Así que, en 2013, armé el bolso y me fui a Rosario con la idea de estudiar y hacer otra cosa", rememora. Casi sin pensarlo, sumido en el dolor, descubrió la disciplina que hoy lo apunta como una de las esperanzas más firmes del pugilismo nacional.
Este sábado, Machete, como lo apodan sus amigos, se convirtió en el primer boxeador argentino en combatir tras 142 días de inactividad oficial por la pandemia del coronavirus. En el Casino Mohegan Sun de Connecticut se enfrentó al norteamericano Joseph George.
El semipesado argentino Marcos Escudero perdió por un escalofriante KO en el final del noveno round de su revancha en la categoría ante el estadounidense Joseph George, disputada en el Mohegan Sun Casino de Uncasville, Connecticut. El local definió una pelea muy pareja con un preciso y contundente golpe ascendente.
En lo que significó el reinicio de la actividad para los púgiles argentinos en medio de la pandemia de coronavirus, el oriundo de General Arenales, de 27 años, había sostenido de buena forma el desarrollo del combate, pero se encontró con un zurdazo impresionante que lo dejó en la lona.
Tras la nueva derrota ante George, quien lo había vencido en noviembre de 2019 por una polémica decisión dividida, el radicado en Córdoba quedó con un récord de diez victorias (9 por la vía rápida) y dos derrotas (la primera por KO).