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Riquelme fue ovacionado en la despedida de Diego Forlán

El flamante vice 2° de Boca viajó a Montevideo para ser parte del homenaje al uruguayo y allí se cruzó con quien compartió sus inicios en el Xeneize.

En Uruguay, la admiración se vuelca hoy para Luis Suárez y sus gestas en Barcelona, pero Diego Forlán fue un verdadero ídolo para el fútbol charrúa en un pasado reciente. El exdelantero de Independiente trascendió a nivel mundial y en la noche del sábado recibió su merecida despedida en el estadio Centenario de Montevideo.

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Aunque en el marco del adiós para "Cachavacha" sobresalió la figura de Juan Román Riquelme, que en el amistoso formó parte del equipo de los Amigos de Forlán, oponente de la selección uruguaya del período 2010/2011. Cuando el mandamás del fútbol de Boca subió al estrado en la presentación del equipo recibió una ovación de todo el estadio. Tanto él como Forlán, Suárez, Juan Sebastián Verón y el ex Peñarol Antonio Pacheco fueron los más vivados.

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En la antesala del partido despedida, que terminó 6-6, Riquelme había hablado un minuto con la transmisión oficial del partido y le preguntaron por Facundo Pellistri, un mediocampista ofensivo de Peñarol que solo tiene 18 años. Lejos de esquivar la pregunta sobre el joven del Manya, Riquelme expresó: "¿Si Pellistri vendrá a Boca? Ya veremos. Nombran millones de jugadores. Es un jugador joven, habilidoso. No jugó tanto pero se nota que es bastante sinvergüenza para jugar a la pelota y creo que eso es muy importante".

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Para cerrar, Román, que jugó con la N° 7 en la espalda en lugar de la 10, agregó: "Ya no hay muchos jugadores como él que se animen a ser tan sinvergüenzas adentro de la cancha y eso para mí hay que valorarlo y mucho". Así, medio de tanto silencio y a la espera del nombramiento de Miguel Angel Russo como DT de Boca, Riquelme se refirió a uno de los posibles refuerzos.

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Riquelme fue compañero de Forlán en aquel heroico Villarreal de la Liga Española que en 2006 accedió a las semifinales de la Champions League. El Submarino Amarillo tuvo la posibilidad de llegar a la final pero falló en la definición por penales, justamente por la mala puntería del máximo ídolo xeneize en la historia. "El penal de Román nos podía haber dado la chance de ir al alargue y tal vez acceder a una final con Barcelona, pero es fútbol, estuvimos dos veces en la puerta y no se dio", se lamentó Forlán cuando le recordaron aquel momento futbolístico.

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