Al respecto, la Dra. Romina Florencia Cabrera, Directora internacional en Seguridad Informática Ascasepp (Sede central España), explicó que "el proceso electrónico hace mucho que se viene trabajando con grandes académicos en el extranjero y en Argentina, y realmente creo que con esta pandemia nos hemos puesto en conciencia que pasar del soporte papel al soporte digital no era solamente una idea o una tarea, sino un cambio de paradigma".
Para la abogada, "la firma digital, el expediente electrónico son conceptos muy evolucionados tal vez para la justicia tradicional y tiene que incorporarlo, pero no solamente con tecnologías, sino con trabajo en equipo, recursos humanos, educación y sobre todo con una visión sistemática y holística hacia el futuro integrando todo porque la tecnificación de la justicia es un todo integrado", afirmó.
Consultada por la protección de datos personales o privados, dijo que "es un derecho autónomo independiente y Argentina a través de la Ley de Protección de Datos Personales y de la dirección tiene en cuenta estándares mínimos de protección que deben respetarse, incluyendo reglamento europeo de protección de datos. Hay asuntos delicados, que a pesar de la informatización, deben protegerse y el Poder Judicial debe estar preparado en su sector jurídico y en su sector de tecnología", indicó.
La Directora del Capitulo Argentina Latin iuris consideró, teniendo en cuenta lo que está atravesando el país a raíz de la pandemia, que hoy es la oportunidad para informatizar totalmente la justicia.
"Como no todos podemos tener acceso a la firma digital entonces es como una utopía la informatización de la justicia. Nos falta una mejor interoperabilidad entre los poderes de nuestro sistema democrático y republicano y deberían trabajar más para adaptarse a este nuevo entorno digital, sino nos vamos a quedar atrás", concluyó.