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Sergio Peralta recuerda el momento más feliz como futbolista

Sergio Peralta, jugador de Amalia, recuerda a más de un año, el momento que compartió en la cancha con su hijo en el momento del debut.

El fútbol es un deporte que no entiende de lógicas. Sergio Peralta, futbolista que se inició en el CEF 18, que pasó por las divisiones inferiores de Rosario Central y que recaló en San Martín como en otros tantos equipos del ascenso de las distintas categorías del fútbol argentino, iba a tener su tarde soñada.

Con una familia conformada, buscó hace unos años radicarse de manera definitiva en nuestra provincia y jugar en la Liga Tucumana de Fútbol para el Club Amalia. Mariano de 17 años y las cosas inesperadas que tiene este deporte, le dieron la dicha de estar presente el día que su hijo debutó en la primera división de Amalia, pero en este caso particular, como compañero de equipo.

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Sergio Peralta acompañó siempre a su hijo Mariano.

Sergio Peralta acompañó siempre a su hijo Mariano.

Hace ya unos largos meses de este momento felíz, Sergio Peralta recuerda ese día: “fue el 3 de mayo de 2019 por la tercera fecha de la Liga Tucumana contra Villa Mitre”.

“La verdad que fue unas de las cosas más lindas que me pasó como jugador de fútbol y como padre, lo disfrute después a medida que pasaron los días porque en ese momento quería que le salgan las cosas bien y por eso cuando entro estaba un poco nervioso, me imagino como estaba él”, dijo el jugador de Amalia.

“Pero dentro de todo salió bien el partido, empatamos 0 a 0. Para los dos fue un buen torneo perdimos la semifinal por penales contra Atlético. El jugó bastantes partidos en un plantel donde había muchos y muy buenos jugadores”, contó orgulloso Sergio Peralta.

Mariano Peralta, también contó sus sensaciones de ese partido. “Jugar con el viejo significó mucho para mí, un sueño que anhelaba desde que empecé a jugar en el CEF 18, sabía y tenía la esperanza de que íbamos a jugar en algún momento juntos”, contó Mariano.

“Fue un año muy bueno el que pasamos tanto deportivo y como familia también, la verdad que no lo podía creer entrar a la cancha, saber que el viejo estaba ahí adentro jugando conmigo, y no en la tribuna como me hizo el aguante siempre. Gracias a Dios nos fue bien, un año muy bueno a pesar que no pudimos coronarlo de la mejor manera. La verdad un sueño hecho realidad”, comenta Mariano Peralta.

“Mi viejo ese partido jugó de entrada, yo estaba en el banco, faltando diez u ocho minutos me llama Osvaldo Bernasconi, (DT de Amalia) y me dice que iba a entrar, me da las indicaciones, cuando iba entrenando y ver al viejo ahí atrás mío defendiendo, me dio una emoción muy fuerte, por suerte ese partido nos fue bien”, cierra Mariano Peralta, que tuvo la dicha que no muchos tienen.

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