ECONOMIA |
Lejos de las estadísticas, el mejor pulso del descontrol de los precios puede apreciarse en los productos que consumen todos los días los argentinos. Así un buen termómetro de la inflación lo constituye la evolución de los precios de productos como una pizza, una docena de facturas, el pan y un café.
Un sondeo realizado por el Centro de Estudios Nuevo Milenio reveló que en el último año, en la ciudad de Buenos Aires, una grande de mozzarella aumentó 19,5%, un café es un 12% más caro que hace un año mientras que la docena de facturas se encareció un 36% en el mismo periodo, y el pan un 24%.
Los datos surgen de un relevamiento realizado en más de 200 comercios en una docena de barrios porteños durante la primera semana de junio, según publicó ámbito.com. Los negocios incluidos en la muestra están ubicados en varios barrios porteños.
El informe destacó además que, respecto a pizzas, el valor promedio se ubicó en 203 pesos, contra los 170 pesos del año pasado. El valor más alto promedio correspondió al barrio de San Nicolás, con 260 pesos, en tanto en Boedo se registró el menor con 141 pesos.
Por su parte, el precio promedio del café en pocillo en bares y restaurantes fue de 43,13 pesos, contra los 38,56 pesos de 2017. El más costoso se relevó en Caballito, a 56 pesos; y el más barato, entre Boedo y Parque Patricios, a 25 pesos.
Por último, la docena de facturas se enfrentó este año con 111 pesos a los 82 pesos del 2017. En este ítem, Recoleta representó el barrio más caro, con 154 pesos la docena.
Fuente: Minuto Uno.