ECONOMIA |

Los gastos de funcionamiento alcanzaron un 3% del PBI

El aporte para mantener las consecuencias de la pandemia en junio fue de más $253 millones. Se explica en la baja real de los salarios de empleados públicos.

El déficit primario fue de $253.706 millones en junio, es decir 0,9% del PBI. En total, el acumulado de los primeros seis meses del año llegó a un rojo sin contar intereses de la deuda, de 3% del PBI. En cambio, el negativo total ya rozó el 4% del producto. En junio se volvió a ver una contracción de los gastos de funcionamiento, lo que se explica principalmente por la baja real en los salarios de los empleados públicos, y lo que muestra que el déficit se disparó esencialmente por la política fiscal propia de la pandemia. Es decir, por los gastos extraordinarios para sostener a las empresas, provincias y hogares y por la fuerte caída en la recaudación tributaria.

En una dinámica que ya se viene observando desde hace unos meses, y que contradice a alguna lecturas de analistas y medios de prensa que sostienen que el ajuste lo hizo solamente el sector privado, los gastos de funcionamiento subieron apenas 13%. Muy por debajo de la inflación interanual de 42,8% que se registró el mes pasado. De hecho, la contracción en términos reales fue de 20,9% y está principalmente explicada por la dinámica también de los salarios públicos: con fuerte inflación, no fueron suficientemente corregidos en términos nominales.

El rojo primario creció casi a la par de la emisión monetaria durante el primer semestre del 2020. El economista del Iaraf, Nadin Argañaraz, destacó: "El déficit primario del primer semestre fue del 3% del PBI, más intereses de deuda por 1,1% del producto, aproximadamente". Argañaraz mostró además que mientras el déficit fue de $1,18 billones, la emisión monetaria para abastecer de liquidez al Tesoro fue de $1,25 billones.

Martín Guzmán.png
Pese al ajuste en gastos "No-Covid" el rojo llegó a 3% del PBI. En junio fue de $253.706 millones

Pese al ajuste en gastos "No-Covid" el rojo llegó a 3% del PBI. En junio fue de $253.706 millones

En junio el déficit primario creció 3745,1% interanual. Es una multiplicación extraordinaria. Los ingresos totales treparon apenas 7,8% anual, es decir que cayeron 24,6% real. Hubo fuerte impacto de la pandemia en ese número, ya que Afip encaró una suspensión y recorte de las contribuciones patronales a la seguridad social, en el marco del ATP. Por otro lado, la contracción de la actividad tiró para abajo a los tributos relacionados con el consumo. Además, Anses suspendió el pago de las cuotas de los créditos al sector privado.

Por el lado del gasto, el crecimiento fue de 72,7% nominal interanual. Es decir, una suba de 20,9% real. Las prestaciones sociales crecieron 31,3% en términos reales, de la mano del IFE y el salario complementario, que sumaron $99.750 millones. También aportó lo suyo el programa Alimentar, con un incremento de $8.050 millones. Por el congelamiento tarifario, los subsidios marcaron una suba real de 32,4%. Además el gasto por envíos a las provincias se casi cuadruplicó en la comparación interanual, con una suba nominal de 274,9%.

El gasto de capital y los intereses de la deuda, en cambio, registraron caídas nominales fuertes, de 25,9% y 43%.

Desde el Grupo SBS destacaron: "La situación se mantiene muy negativa y lo único bueno que se puede decir es que la dinámica mejoró levemente en el margen. Los ingresos siguen cayendo con fuerza pero menos que en abril y mayo, especialmente los recursos tributarios vinculados a la actividad y el empleo. El gasto aún crece a un ritmo también significativo pero inferior al de meses anteriores, con un importante impulso de las prestaciones sociales en medio de la crisis y recortes para nada despreciables en términos de gastos operativos y de capital. No obstante, la brecha entre la evolución de ingresos y gastos sigue siendo muy importante (45,5 puntos) y la situación es crítica".

Y agregaron: "El segundo semestre mostraría una recuperación gradual de los ingresos a medida que se vayan normalizando más actividades, algo que ya se ve en los indicadores diarios de recaudación. Sin embargo, el alza del gasto mostraría bastante más persistencia ante el evidente deterioro de los indicadores sociales (más de 40% de los gastos de emergencia fueron a programas de asistencia social). A la luz de los indicadores de junio, elevamos nuestra proyección de déficit primario a 7% del PBI para este año (desde 6,5%), cifra que marcaría un récord en la historia económica de Argentina".

FUENTE: Bae Negocios

Dejá tu comentario