Al pie del cerro Alto del Rey encontramos los vestigios de una antigua civilización, la Ciudad Sagrada de los Quilmes. Uno de los asentamientos más antiguos del país, donde sus habitantes dieron larga batalla a la conquista española.
Quilmes, Ciudad Sagrada: un viaje a la antigua civilización
La Ciudad Sagrada de los Quilmes, es uno de los asentamientos más antiguos del país. Un sitio imperdible para tucumanos y para turistas que visitan Tucumán.
Son los descendientes de este pueblo originario quienes reciben a los turistas, enriqueciendo la visita con un aporte cultural invaluable.
Hoy es un sitio de gran valor arqueológico y de especial energía que nos relata la historia de los Quilmes en Tucumán.
Info para tener en cuenta
Para visitar la Ciudad Sagrada de los Quilmes, es imprescindible llevar un sombrero, ropa cómoda para subir hasta la cima del fuerte y protector solar.
Desde las 8 de la mañana podrá recorrerse el atractivo turístico que ofrecerá visitas guiadas. Los recorridos se llevarán a cabo con la implementación de protocolos. Para ello será necesario: mantener la distancia, el uso de barbijo es obligatorio durante todo el recorrido, como así también la higienización de manos.
Con el propósito de garantizar el resguardo de las personas que trabajan en el lugar, a cargo de la recepción de los turistas, el Ente Tucumán Turismo les entregó termómetros, máscaras, barbijos y alcohol en gel.
Los protocolos que se implementarán son los ya aprobados por el COE para las diferentes actividades turísticas que aplican en este sitio arqueológico (Protocolos para Museos, sitios patrimoniales y centros de interpretación; Guías de Turismo y Gastronómicos).
Cómo llegar a la Ciudad Sagrada de Los Quilmes
Para llegar a la Ciudad Sagrada de Quilmes en vehículo particular se debe tomar desde Amaicha del Valle la ruta provincial 307, recorrer unos 15 kilómetros hasta el empalme con la ruta nacional 40, y desde allí continuar tres kilómetros más en dirección norte. A mano izquierda, se deberá ingresar por un camino de tierra que, cinco kilómetros más adelante, permite acceder al lugar.