La encargada del servicio de Nefrología del hospital Centro de Salud, doctora María Marta Vargas, destacó que el lema 2020 prioriza la prevención y accesibilidad equitativa de la salud renal para todas las personas, en consonancia con el alto impacto que la enfermedad tiene en la población ya que 2 de cada 10 personas sufren alguna afección de este tipo y no la conocen.
El Día Internacional del Riñón busca visibilizar las funciones que este órgano cumple y su importancia para la salud integral. Muchos factores de riesgo, como hipertensión, diabetes, sobrepeso, hábitos tóxicos o antecedentes familiares directos de enfermedad que afectan la función cardíaca; también lesionan el riñón y pueden llegar a incapacitarlo para cumplir con sus funciones homeostáticas, ya que no solo produce la orina, sino que también regula la presión arterial y metaboliza sustancias para que luego sean eliminadas del organismo.
Al respecto, Vargas comentó que la línea de trabajo general, más allá de la campaña, es poder incentivar a la población a concurrir a los centros de salud primarios para realizar la detección y luego ser derivados a los correspondientes servicios de nefrología de los hospitales de mayor complejidad.
La profesora a cargo de la Cátedra de Bioquímica Clínica III de la Facultad de Bioquímica, Química y Farmacia de la UNT, doctora Rossana Cristina Pérez Aguilar, comentó que esta campaña se realiza en el Centro de Salud ya que la cátedra se encuentra allí y además por el compromiso activo que siempre tuvo la institución con este tipo de iniciativas. Una de las determinaciones que permite evaluar la función renal se realiza en el hospital y el resto se realiza en la Facultad de Bioquímica, para luego aunar los resultados y optimizar los recursos.
“El objetivo de la campaña es la detección precoz de la enfermedad renal y la concientización de la población acerca de hábitos saludables para prevenir, detener o enlentecer la aparición de la misma, que es silenciosa y abarca todas las edades. La población adulta es el objetivo principal en esta ocasión, trabajamos con pacientes de 18 a 70 años, que nos permiten posicionar el estadio de la enfermedad”, dijo la profesional, al tiempo que agregó con las pruebas bioquímicas de creatinina enzimática y albuminuria es posible estadificar la gravedad de la afección y a partir de allí ser tratado por el especialista.