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Almirante - Quilmes y un empate a la medida de San Martín

El puntero y su escolta no lograron romper el cero. La Fragata sigue siendo líder, pero mañana lo puede alcanzar San Martín de Tucumán.

Almirante Brown y Quilmes empataron sin goles por la fecha 32 de la Zona A de la Primera Nacional. El partido terminó caliente por una jugada sobre Mariano Pavone que todo el Cervecero pidió falta y penal que Echenique no vio. En la lucha por el ascenso, la Fragata sigue líder, pero este lunes San Martín, si le gana a Agropecuario, lo puede alcanzar en la punta.

El primer tiempo fue solo del conjunto local. Si bien no pudo ponerse en ventaja en el marcador, Almirante tuvo las ocasiones de gol más claras. Por el lado visitante, poco fue lo que generaron y terminaron aguantando el empate sin goles durante los 45 minutos.

En los últimos minutos del duelo, la Fragata intentó ir al ataque en búsqueda de los tres puntos que le dieran aire en la punta de la zona A y dejaba espacio atrás. Y a los 36 minutos del complemento llegó la polémica: Mariano Pavone le gana una pelota a Agustín Dattola dentro del área del local y le cometió una falta que el árbitro no vio y claramente no cobró. El goleador ex Estudiantes y River quedó tendido en el piso por varios segundos y cuando logró levantarse se lo vio muy enojado por el fallo del juez.

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Escandaloso penal no cobrado a Quilmes. El juez obvio una jugada clara en el área y favoreció a Almirante.

Escandaloso penal no cobrado a Quilmes. El juez obvio una jugada clara en el área y favoreció a Almirante.

El empate favorece a San Martín de Tucumán que mañana cerrará la fecha frente a otro de los que pelean arriba: Agropecuario. Si el Santo consigue el triunfo alcanzará en puntos a la fragata, pero quedará como virtual puntero porque tiene una mayor diferencia de gol que Almirante (17 sobre 9).

Además, con una victoria El Ciruja sacará de competencia a Agropecuario -por ahora quinto en la tabla- que quedaría a 6 puntos de San Martín sobre 6 en juego. Virtualmente, el Santo se estaría asegurando que de mínima peleará por uno de los dos ascensos. Por todo, y porque además los hinchas y el club celebrarán su aniversario 112, el partido de mañana es una verdadera final a la que está obligado a ganar. No habrá espacios para especulaciones, uUna vez que comience a rodar la pelota, no habrá vuelta atrás: será matar o morir en el intento.

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