Barcelona derrotó 2-1 al Rayo Vallecano por los octavos de final de la Copa del Rey, un torneo al que el propio Ronald Koeman le dio vital importancia al mencionarlo como el camino más posible para su Blaugrana para conseguir un título este año. Lionel Messi volvió luego de su suspensión por dos partidos y aportó un gol e ideó la jugada del segundo.
El primer tanto, para sorpresa, llegó de parte del Rayo Vallecano y ya en la segunda etapa: un buen contraataque, la pelota abierta hacia la derecha, Andrés Martín que desbordó y envió el centro bajo para que el joven Fran García la empujara a las redes y decretara el 1-0.
Tras el tanto local, Koeman mandó a la cancha a tres jugadores: Pedri, Jordi Alba y Dembélé saltaron al césped para intentar revertir el resultado, y los cambios le dieron algo de frescura al Barça, que empató rápidamente: De Jong filtró un gran pase para un habilitado Griezmann que, mano a mano, cedió para Lionel Messi, que volvía a la titularidad esta tarde y solo tuvo que empujarla a las redes.
A diez del final, Barcelona pudo quebrar la resistencia de los madrileños, que ya flaqueaba. Y lo hizo con una jugada patentada: habilitación de Messi para Jordi Alba y centro/pase del lateral izquierdo para, en este caso, Frenkie De Jong, que estampó el 2-1 parcial para la visita.
El propio Messi tuvo la chance de liquidarlo en el descuento pero tras dejar a dos jugadores y al arquero en el camino en apenas unos metros, se quedó sin ángulo y definió afuera. El triunfo pone a los catalanes en los cuartos de final, y ahora deberán esperar al sorteo del viernes para conocer a su rival.