El Gobierno español propone convertir a España en un país libre de humo y prepara una reforma legal que ampliará las zonas en que estará prohibido fumar en todo el país con restricciones en lugares como terrazas de bares y restaurantes, espacios educativos al aire libre como patios escolares y campus universitarios, así como vehículos destinados al trabajo.
También se extenderá la prohibición a instalaciones deportivas, piscinas públicas, marquesinas de transporte y eventos festivos al aire libre. Con esta iniciativa, que forma parte del Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo que fue aprobado hace un año, el Gobierno busca reforzar la protección de la salud pública.
Esperan aprobación parlamentaria
Aunque aún debe superar su segunda revisión en el Consejo de Ministros y pasar por el trámite parlamentario en el Congreso de los Diputados, se trata de un paso clave para situar a España entre los países líderes en la lucha contra el tabaquismo.
La legislación también prevé equiparar legalmente los cigarrillos electrónicos y los dispositivos de tabaco calentado al tabaco convencional, lo que implicará restricciones similares en espacios públicos. Para ello, se está elaborando un real decreto pendiente de aprobación a nivel europeo.
Además, el plan contempla el fortalecimiento de las ayudas públicas para dejar de fumar a través del Sistema Nacional de Salud y un incremento fiscal sobre el tabaco y sus derivados.