Fue la propia familia quien comenzó con la campaña de visibilización en redes sociales a partir de la denuncia que hizo su novio, un cordobés identificado como José María Irusta. A pesar de la urgencia, la policía brasileña comenzó la búsqueda recién un día después y todavía no da respuestas.
Según la investigación, no hay indicios de que se haya marchado por sus propios medios porque dejó todas sus pertenencias y tampoco dio aviso de que se iría de la propiedad.
"Es una situación que no entendemos, es muy extraño y muy de golpe. Ya pasaron 48 horas que despareció, el pueblo tiene 1.600 personas. Me parece extraño que ya no la hayan encontrado", comentó su hermano en diálogo con una radio de la zona.
En la misma línea agregó que su hermana vivía en Ceará hacía ya tres años y que "estaba preocupada por la inseguridad de los pueblos que recorrió, había visto que mataron a una persona donde trabajaba”.
Interpol se sumó a la investigación y ya comenzó a intensificar las búsquedas en los aeropuertos. De acuerdo con lo que contó el hermano de Laura, las amigas que habían hablado con ella durante el último fin de semana previo a su desaparición, la habían notado "con mucha angustia y desgastada, como cansada".
Según su perfil de redes sociales, Laura se dedicaba a producir y vender productos artesanales. Solía publicar fotos de comida y de los viajes con su pareja, a quien había conocido a través de redes sociales.
FUENTE: C5N