Li Wenliang, el médico chino que intentó advertir a otros médicos sobre el coronavirus, murió después de contraer la infección en Wuhan.
El médico tenía 34 años y tras detectar siete casos de un virus muy similar al SARS, Li, oftalmólogo del Hospital Central de la ciudad, usó las redes sociales para advertir a sus colegas.
En su mensaje del 30 de diciembre, enviado a través de un chat, Li advirtió que tuvieran cuidado con una nueva enfermedad misteriosa y les recomendó usar ropa protectora para evitar contagiarse.
Cuatro días más tarde, recibió una visita de funcionarios de la Oficina de Seguridad quienes lo reprimieron y lo acusaron de difamación.
Días después, la policía de Wuhan informó de que había detenido a ocho médicos, entre ellos Li, por difundir rumores sobre el coronavirus. Semanas más tarde la Corte Suprema de China criticó la actitud policial, ya que consideró que si se hubieran adoptado medidas como usar máscaras, desinfección estricta y evitar ir al mercado mayorista de mariscos de Huanan, habría sido positivo para contener la propagación del virus.