Según datos de las 9.30 hora argentina, los bonos globales en dólares mostraron incrementos que variaban entre el 1,79% y el 2,47%, dependiendo de la extensión de sus vencimientos. El que más trepa es el Global 2041 (GD41), seguido por el Global 2038 (GD38), y el Global 2038 (GD35).
En este contexto, el riesgo país argentino se redujo 57 puntos, ubicándose en 872 unidades.
De continuar en este nivel, el índice EMBI+ Argentina de JP Morgan, conocido como país de riesgo, alcanzaría su valor más bajo desde el 9 de agosto de 2019, previo a las elecciones PASO en las que Alberto Fernández se posicionó como favorito.
En tanto, los títulos bajo legislación de Nueva York iniciaron la jornada con subas destacadas, mientras que los Bonares —emitidos bajo ley local— mostraron un bajo volumen de operaciones y escasas variaciones en sus precios.
Leonardo Svirsky, operador de renta fija, analizó los efectos de este escenario político en la deuda soberana de Argentina. “La victoria de Trump es una buena noticia para la deuda argentina, principalmente porque el gobierno argentino comparte afinidades ideológicas con la administración republicana”, señaló al portal Infobae.
El especialista también anticipó que el nuevo contexto podría facilitar un posible acuerdo con el FMI que incluya desembolsos adicionales, lo que daría un impulso positivo a los bonos argentinos.
Esta reacción en los bonos argentinos se enmarca en un clima de optimismo sobre las relaciones bilaterales entre Argentina y Estados Unidos. Mariano Marcó del Pont, de Silvercloud Advisors, señaló que “pese al aumento de las tasas en EE.UU. tras la victoria republicana, los bonos argentinos arrancan en Nueva York con subas de hasta un 3%”.
La afinidad ideológica entre los gobiernos de Trump y de Javier Milei es vista en los mercados como una señal favorable para la deuda argentina, que podría beneficiar de una cooperación bilateral más estrecha entre ambas naciones.