El incidente carece de antecedentes en la historia parlamentaria. El funcionario mientras abandonaba el Palacio Legislativo declaró a “La Prensa” que había sido tratado de manera irrespetuosa, por lo que no tenían sentido seguir respondiendo las preguntas de los senadores de la oposición si no le creían.
La legisladora que provocó el enojo de Francos fue llamada a rectificarse desde la presidencia del cuerpo que en ese momento ejercía el oficialista Bartolomé Abdala, pero se negó a hacerlo y su burló de Francos llamándolo “pobrecito”. También argumentó que “no podía ofenderse porque era un mentiroso”.
Siguió además cuestionando a los gritos al funcionario a pesar de que el propio presidente de su bloque, José Mayans, la llamó al orden. “Pero pará, terminála, cállate”, la amonestó infructuosamente el legislador formoseño, hasta que la sesión quedó interrumpida por la salida de Francos del recinto.
Como consecuencia del insólito episodio el cuerpo aprobó –a instancias de Mayans—una nueva invitación para que el funcionario vuelva a la Cámara el miércoles próximo. El senador formoseño explicó que la oposición tenía derecho a exponer “su visión” de los problemas y que “no había que dramatizar”. Calificó lo ocurrido como “un desencuentro”.
Francos había comenzado a dar su informe poco antes del mediodía y las primeras preguntas habían sido formuladas por senadores del oficialismo y aliados. En su presentación de apertura destacó la performance macroeconómica del gobierno y remarcado la crisis en que la última administración peronista había dejado al país.
Poco antes de la intervención de López otros senadores peronistas habían rechazado el diagnóstico de Francos sobre la actual situación económica e incluso anticipado una inminente crisis, pero la sesión se había desarrollado en un marco de normalidad y sin agresiones.
FUENTE: La Prensa