En el segmento "Historias Paranormales de Tucumán", Silvia Kieffer le contó a LV12 los extraños hechos que suceden en comisarías de la provincia.
Silvia Kieffer de Tucumán Paranormal, participó una vez más del segmento "Historias Paranormales de Tucumán" en LV12 Radio Independencia y en esta ocasión mencionó varias historias en comisarías.
"Las comisarías son lugares en donde hay mucha actividad paranormal, quizás por toda la gente que pasa o pasó por ahí. Generalmente es algo que no lo cuentan muy abiertamente, por la presión que hay con el personal policial, pero ellos se acostumbran y conviven con esas cosas", comenzó diciendo.
Kieffer señaló que por ejemplo en la Jefatura de Policía "hasta el día de hoy, hay oficinas en donde se escuchan ruidos o se ven cosas. Les cambian las cosas de lugar. Son lugares que encierran mucha historia y tienen una carga muy grande de energía de gente que pasó por ahí".
"Hay comisarías, como la de Santa Bárbara, en dónde guardan hace mucho tiempo vehículos que participaron en accidentes, en hechos luctuosos y por las noches, en esos vehículos se escuchan lamentos, llantos. No es la única comisaría, en la mayoría de las comisarías del interior, donde se guardan estos vehículos se escuchan o se ven cosas. Es creer o reventar", reveló.
Por otro lado, la investigadora dijo que "hay comisarías que en horas de la siesta o de la noche les mueven o les cambian de lugar las cosas. Se registran sonidos".
"Hay un relato de un oficial joven que fue designado a una comisaría del interior y llegó y se dio que no tenía gente alrededor de la comisaría, eran prácticamente casas abandonadas. El edificio de la comisaría también bastante deteriorado. Se quedó ahí ese día, se durmió en el escritorio y soñó y sentía como que alguien le apretaba el cuello y se quedó fuera de la comisaría porque se asustó mucho y cuando lo relevaron se dio cuenta que realmente le habían estado apretando el cuello y tenía marcas de dedos y hasta de garras en el cuello", cerró.
