En este marco LV12 Radio Independencia se contactó con Lalo Zanoni, especialista en nuevas tecnologías, para hablar sobre los límites y el alcance la IA.
"No existe el límite, el creador o incluso el usuario de la Inteligencia Artificial va a ir hasta donde se pueda, hasta donde la tecnología lo permita y eso se va ampliando día a día porque cada día se puede hacer más cosas. Uno va usando las herramientas que están disponibles, o sea que el límite es difuso", comentó.
En el caso de la inteligencia artificia el límite va a venir a partir de la regulación, de las leyes, pero todavía no hay ley.
Siguiendo esta línea, el especialista aclara que la IA es un fenómeno de larga data, pese a su reciente explosión con ChatGPT: "En realidad, ChatGPT es una aplicación, un software que responde a lo que sería un Chat Bot, que tiene que ver con la inteligencia artificial generativa, que es una rama de la inteligencia artificial que se dedica a generar contenido. Este contenido en el caso de ChatGPT es texto, pero también pueden ser imágenes, videos, audios y todo tipo de contenido".
"Esto se llama inteligencia artificial generativa y nace masivamente de la mano de ChatGPT hace solo un año y medio. La inteligencia artificial como concepto, como idea nace en los años 50, pero los últimos diez años es cuando se pega el salto grande que estamos viendo ahora y la inteligencia artificial tiene que ver con muchas cosas, con los algoritmos, con los saltos autónomos, con la visión por computadora, es decir que una cámara enfoque a una cara o aun objeto y lo reconozca", añadió.
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Un debate urgente sobre el alcance de la Inteligencia Artificial que ya está presente en la vida y en el trabajo.
La inteligencia artificial es ya omnipresente en nuestras vidas
"Sin darnos cuenta, nosotros podemos trazar un perfil de personalidad, de hábitos, de consumo, de movimientos físicos solamente con el celular. Con el celular yo puedo saber quiénes son tus contactos, tus amigos, tu familia, tus fotos, tu tarjeta de crédito, tus compras, los sitios que visitaste, tu historial de visitas, las películas que viste, etc.", explicó.
Y continuó: "Por supuesto que se trata de algoritmos y de inteligencia artificial, no de personas. Es decir, no hay una persona que sabe o que te espía, sin embargo, eso requiere de muchísima atención por parte de los gobiernos y de ver cómo se relacionan las leyes y las normas que ya existen con las empresas que generan esta inteligencia artificial".
"Estamos hablando de 5 o 10 empresas como máximo que tienen toda esta data de personas. Entonces, cuando ya el gobierno pierde ese control de sus ciudadanos, estamos frente a un problema porque el poder pierde cambia de manos y si se lo damos a empresas privadas, estamos ante un nuevo panorama mundial y por lo menos tenemos que intentar que ese poder vuelva al gobierno, que es quien nos representa al menos en las repúblicas democráticas", finalizó.
