El exdelantero Miguel Ángel Gambier, ídolo de Colón de Santa Fe y futbolista de extensa trayectoria en primera y en el ascenso, falleció este miércoles como consecuencia de un cáncer que padecía desde hacía tres años.
El Pampa, nacido el 9 de mayo en Pellegrini (en el oeste de la provincia de Buenos Aires, a pocos kilómetros del límite con La Pampa), se encontraba internado y su estado se había agravado en los últimos días. De acuerdo con lo que había contado la semana pasada su hijo Rodrigo en FM Sol de Santa Fe, al exfutbolista le habían detectado en 2013 un cáncer de estómago que luego se le trasladó al peritoneo.
Ante la gravedad del cuadro, el viernes la Comisión Directiva de Colón y un grupo de socios vitalicios del club le habían brindado un emotivo homenaje. Además, los hinchas habían exhibido banderas de apoyo al ídolo sabalero, quien disputó 62 partidos y marcó 30 goles entre 1994 y 1996, y consiguió el ascenso a primera en 1995. En esa campaña fue el máximo anotador del equipo que dirigía el uruguayo Nelson Pedro Chabay y anotó dos en la final del octogonal ante San Martín de Tucumán.
El día del homenaje, Gambier hizo llegar una carta de agradecimiento a los hinchas. “Hace bien saber que lo que uno aportó provocó recuerdos inolvidables en cada uno de ustedes y créanme que ustedes en mí también dejaron huellas que jamás se borrarán. ¡Gracias pueblo sabalero! Un abrazo inmenso de un raza más”, decía la misiva.
Si bien en Colón se ganó un afecto superlativo, la trayectoria de Gambier incluyó pasos destacados por otros clubes que le valieron el reconocimiento de varias hinchadas. Debutó en 1983 en Deportivo Morón, en la Primera B, y luego tuvo pasos por Independiente, Platense, Gimnasia, Rosario Central, Lanús (logró el ascenso a primera en 1992) y Los Andes. En el exterior jugó en Tiburones Rojos de Veracruz. En el ocaso de su carrera vistió las camisetas de Costa Brava de General Pico y Huracán de Pellegrini.