El Ministerio Fiscal pidió la extensión de prisión preventiva sobre dos imputados que integrarían una banda, mientras investiga a una presunta organización delictiva dedicada al robo de vehículos con inhibidores de alarmas y que tendría ramificaciones en otras provincias junto a posibles vínculos en Bolivia.
En una audiencia celebrada este viernes 12 de septiembre, a pedido de la Unidad Fiscal de Robos y Hurtos III, se resolvió que para uno de ellos, el auxiliar de fiscal Pablo D’Andrea solicitó una prórroga de 13 días, que se cumplirá hasta el 25 de septiembre. En el caso del segundo acusado, quien cumple arresto domiciliario, la medida fue ampliada por cinco días. Ambos se encuentran próximos a acceder a una salida alternativa.
De acuerdo con la acusación, el grupo se dedicaba a sustraer camionetas estacionadas en la vía pública, utilizando inhibidores para apoderarse de la documentación y las chapas patentes, que luego intercambiaban con las de otros vehículos robados. Cuatro víctimas denunciaron hechos ocurridos entre junio y fines de julio de 2024. Las investigaciones permitieron establecer que algunos de los rodados fueron trasladados a Córdoba y al norte del país. El expediente, que ya supera las 3.000 fojas y cuenta con 19 peritajes del ECIF, estima que el perjuicio económico ocasionado ronda los 100 millones de pesos.