El desastre provocado por las fuertes inundaciones, sobre todo en Valencia, por culpa de la peor gota fría del siglo, hace que la cifra de fallecidos no haya dejado de aumentar a lo largo del día. En la primera de las tres jornadas de luto decretadas por el Ejecutivo, no cesan las tareas de rescate en los municipios damnificados, donde también se trabaja para restablecer el servicio de agua y electricidad de los miles de vecinos afectados.
En la pedanía valenciana de La Torre, la Policía ha localizado siete cadáveres (aunque en un principio se informó de que eran ocho) en el interior de un garaje y a otra mujer más dentro de su domicilio. El Ayuntamiento de Valencia, donde han muerto en total al menos 12 personas, ha habilitado en la iglesia de esta pedanía un punto de atención social para canalizar todas las peticiones y ayuda para las personas afectadas. La alcaldesa María José Catalá asegura que se están retirando vehículos, limpiando la zona y acopiando comida y agua.
Mientras tanto, los equipos de emergencia trabajan en distintas localidades en unas horas clave para intentar localizar a personas con vida, ya que todavía puede haber ciudadanos atrapados en garajes, según la teoría que manejan las autoridades. Paralelamente, muchas familias intentan localizar a sus seres queridos rodeados de un panorama desolador con infraestructuras destrozadas, carreteras cortadas y viviendas anegadas.
En Letur, Albacete, también duramente castigada por las inundaciones, cinco personas continúan desaparecidas desde el martes. Las tareas de rescate han finalizado al ponerse el sol y volverán a retomarse a primera hora del viernes. Una mujer fue hallada muerta en este municipio el miércoles.
Las tareas de limpieza, en las que colaboran bomberos, equipos municipales, la UME y centenares de vecinos, han seguido con la labor urgente de retirar el lodo, los escombros y los cientos de vehículos que han quedado apilados en calles y carreteras.
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Coches apilados en una de las calles de Valencia. (Foto: rtve)
Paiporta, la 'zona cero' de la tragedia
Ubicada a apenas 10 kilómetros de la capital valenciana, la localidad de Paiporta es la "zona cero" de la tragedia. Allí, han sido localizado un gran número de víctimas mortales, alrededor de 62, según ha confirmado a TVE la alcaldesa del municipio, Maribel Arbalat.
Los cuerpos recuperados son trasladados a la morgue habilitada en la Ciudad de la Justicia de Valencia, donde se ha reforzado el personal forense para acelerar las identificaciones y autopsias. Además, ante el elevado numero de víctimas, la Generalitat ha habilitado también para este propósito Feria Valencia, a las afueras de la ciudad. El Ministerio de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes ha informado del envío de ocho forenses y tres auxiliares de forense del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses (IMLyCF).
Las calles de este y otros municipios han amanecido cubiertas de un espeso lodo que dificulta caminar y que se acumula también en viviendas y negocios. "En 5 minutos estábamos con el agua por la cintura", relata a TVE Darío, uno de los afectados, que asegura que el desbordamiento se produjo en cuestión de minutos, sin apenas darles tiempo "a nada". "Fue aterrador", asegura Joan San Saloni, también vecino de Paiporta, que acogió en su casa a unas 14 personas.
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El ministro de Política territorial y memoria democrática, Ángel Víctor Torres, ha indicado a última hora de la tarde que no se puede determinar el número exacto de desaparecidos y ha lamentado que "cuantos más días pasen", menor será "la esperanza de encontrarlos vivos". E
l titular de Política Territorial ha asegurado que el Gobierno pone "todas las capacidades de la UME" al servicio de las víctimas y ha indicado que 1.200 efectivos de la UME ya están sobre el terreno y que el viernes se trasladarán 500 más. Según el ministro ya trabajan "1.800 policías nacionales y 750 guardias civiles" así como expertos en seguridad ciudadana.
40.000 personas continúan sin suministro eléctrico
La Diputación de Valencia ha asegurado esta tarde que continúan los esfuerzos para reestablecer "cuanto antes" el suministro de agua potable de los miles de habitantes afectados en una veintena de municipios. Además, a última hora de la tarde, 40.000 personas continúan sin suministro eléctrico en la provincia, lo que influye de manera directa en el abastecimiento de agua. Paiporta, Catarroja, Cheste, Carlet, Siete Aguas, Chiva, Pedralba, Alginet, Benifaió, Sollana, Almussafes y Picassent son solo algunas de las muchas localidades damnificadas.
Mientras tanto, muchos vecinos de las zonas afectadas buscan desesperados productos básicos en los supermercados ante el abastecimiento. Centenares de personas se han trasladado desde la comarca de l'Horta Sud — la más dañada de la provincia, donde se encuentran Alfafar, Benetússer o Paiporta, entre otras — hasta Valencia en busca de suministros en una ola de solidaridad con el resto de ciudadanos.
Sin embargo, también han sido saqueados comercios y viviendas. De hecho, 39 personas has sido detenidas por robos y hurtos, según ha informado la Policía Nacional. Ángel Víctor Torres ha indicado que las administraciones actúan con "contundencia" frente al "pillaje y el ultraje".
Más de 120 carreteras con cortes
También siguen siendo complicadas las comunicaciones por carretera y la DGT mantiene la recomendación de no circular por ninguna vía de la provincia de Valencia a causa de las inundaciones y riadas. Más de 120 carreteras siguen con cortes, entre ellas la A-3 y la A-7. El presidente de la Diputación valenciana, Vicent Mompó, ha firmado un decreto para destinar una inversión urgente de 25 millones de euros para restaurar los daños sufridos en la red provincial, en la que al menos nueve puentes han resultado dañados en distintos puntos.
Mompó ha recordado que estas primeras medidas son solo "el punto de partida" de una "batería de actuaciones" que ayudarán a los ayuntamientos a la reparación tras la "mayor catástrofe natural que se recuerda" en la provincia. Mazón, por su parte, ha recordado tras la reunión del Centro de Coordinación Operativo Integrado (CECOPI) de esta tarde que las carreteras abiertas "son para los servicios de emergencias, sobre todo en la provincia de Valencia".
Asimismo, el AVE entre Madrid y Valencia está fuera de servicio y se espera que siga así entre 15 días y tres semanas. El ministro de Transporte, Óscar Puente, ya ha avisado de que la situación de las cercanías es también "gravísima" porque de las cinco líneas, tres (C1, C2 y C3) "están desaparecidas" y "no contamos con ellas al menos en el corto plazo", porque están en "zona cero", con unos 80 kilómetros "completamente destrozados".
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Las vías del tren a su paso por la localidad de Alfafar.
Mazón ha anunciado 250 millones de euro para ayudas directas e iniciales para los afectados, que serán complementarias a las de otras administraciones, como el Gobierno central. Pedro Sánchez ha avisado desde Valencia de que "la Dana no ha acabado" y ha pedido que se atiendan las "advertencias" de la AEMET, al tiempo que ha garantizado los "recursos económicos" necesarios para recuperar la normalidad y ha recordado que en el Consejo de Ministros de la próxima semana se declarará "zona catastrófica" a los territorios afectados.
También se ha trasladado a Valencia el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, quien, desde allí, ha afeado la falta de "información" y colaboración del Ejecutivo. Mazón, sin embargo, ha agradecido a Sánchez su "cercanía" y "contacto permanente, así como el haber visitado la zona "tan pronto". El presidente de la Generalitat valenciana ha informado de que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, se sumará al equipo de CECOPI del 112 "de manera permanente".