Los imputados conducían estos vehículos con pleno conocimiento de que los mismos provenían de hechos ilícitos recientes ocurridos en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires los días 2 y 3 de noviembre de 2024.
El caso es investigado por la Unidad Fiscal Especializada en Robos y Hurtos II, a cargo de Susana Cordisco, quien fue representada por el auxiliar de fiscal Augusto Moeykens en la audiencia correspondiente al control de las aprehensiones, formulación de cargos y medidas de coerción.
Durante la misma, la UFI interviniente formuló cargos por el delito calificado como encubrimiento agravado en calidad de coautores. En contra de los mismos se impusieron medidas privativas de la libertad por el término de 44 días.
Se imputa a estos sujetos haber actuado de manera conjunta y coordinada, con ánimo de lucro, ocultando el origen ilícito de los automotores, y con el propósito de obtener beneficios económicos mediante su traslado hacia otra jurisdicción. Los imputados tenían pleno conocimiento de la procedencia ilícita de los vehículos y, a pesar de ello, decidieron transportarlos, incurriendo en el delito de encubrimiento agravado por el ánimo de lucro y la habitualidad en la comisión de estos.
Hechos
El día 8 de noviembre de 2024, aproximadamente a las 04:00 AM, en el puesto fronterizo de control vehicular ubicado en la localidad de 7 de Abril, Ruta Provincial 34, km 896, dos ciudadanos fueron interceptados mientras se trasladaban en dos camionetas Toyota SW4 de última generación, una de color gris y otra de color blanca, ambas circulando en sentido de Norte a Sur. Los imputados conducían estos vehículos con pleno conocimiento de que los mismos provenían de hechos ilícitos recientes ocurridos en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires los días 2 y 3 de noviembre de 2024, consistentes en el hurto agravado de automotores.
Durante el control de rutina efectuado por personal policial, se detectaron serias anomalías en la documentación y numeraciones de los vehículos. La camioneta que no coincidía con el número de chasis ni con la numeración grabada en el parabrisas, indicando adulteración, mientras que el chasis correspondía a un dominio con pedido de secuestro por hurto agravado. En cuanto a la otra camioneta, el dominio colocado tampoco coincidía con el número de chasis, el cual estaba asociado a un pedido de secuestro vigente por un hecho de hurto agravado. Ambos pedidos de secuestro habían sido registrados en el Sistema Federal de Comunicaciones Policiales (SIFCOP).