La cifra fue fijada luego de una instancia de conciliación en la que ambas partes pactaron que Wanda debía pagar el monto en dos cuotas iguales de $7.500.000. La primera debía concretarse dentro de las 48 horas posteriores al acuerdo. Sin embargo, el compromiso no se cumplió, y la trabajadora inició nuevas acciones legales.
La empleada, identificada como Daiana había sido contratada para tareas domésticas, pero que la relación laboral terminó abruptamente y sin que se cumpliera con los pagos correspondientes.
En el expediente judicial figura la frase “solicita ampliación de temeridad y malicia”, en alusión a la conducta de la empresaria por haber incumplido los términos acordados en la instancia previa. Esto habilita a la demandante a reclamar no solo el pago original, sino también intereses acumulados y las costas del proceso judicial.
Mientras tanto, Wanda Nara se encuentra en Italia, donde mantiene compromisos laborales y deberá presentarse en Roma el miércoles 28 de mayo para asistir a la audiencia por su divorcio con Mauro Icardi. La empresaria aún no se expresó públicamente sobre esta nueva disputa legal.
FUENTE: Ámbito