La Campaña Nacional contra la Violencia Ginecobstétrica lanzó el pasado 21 de octubre la iniciativa por el acceso a dispositivos intrauterinos sin dolor. Como parte de la propuesta, impulsan un relevamiento a nivel nacional, con la participación de organizaciones de todo el país, para testear el acceso de las personas con capacidad de gestar a la colocación de DIU y SIU.
En este marco LV12 Radio Independencia se contactó con Lujan Arcidiácono, coordinadora de la Campaña Nacional contra Las Violencias Ginecobstétrica, por un DIU sin dolor.
"En realidad nosotras comenzamos a trabajar hace más de dos años en la visibilización de lo que se conoce como violencia obstétrica que ejerce el personal de salud en el marco de los procesos reproductivos embarazo, parto, posparto y lo que nos fuimos dando cuenta es que en realidad, esos patrones que permiten reproducir y sostener la violencia también se encuentran antes del proceso reproductivo, muchas veces en la consulta ginecológica", explicó la entrevistada.
Y continuó: "Hay ciertas estructuras creadas y modelos de atención que más allá de la buena o mala voluntad de un profesional de la salud, más allá de la intencionalidad o no de ejercer violencia, hay ciertas circunstancias del sistema de salud que potencian y reproducen esta manera de abordar los procesos ginecológicos".
"Está naturalizado de alguna manera que, en las consultas ginecológicas en general, las practicas que suceden y en especial en relación a este tipo dispositivo, suelen tener como la perspectiva de que aguantemos el dolor porque no es para tanto", añadió.
DIU sin dolor
A nivel mundial, cientos de miles de personas utilizan el DIU o SIU como método anticonceptivo o para el tratamiento de diversas patologías. Sin embargo, el dolor y las experiencias de las usuarias a menudo son minimizados.
"Lo que empezó a pasar en algunas partes del mundo como Reino Unido y Estados Unidos, fue que las usuarias empezaron a alzar la voz y contar sus experiencias, entonces se dieron cuenta que no eran casos aislados, sino que mayoritariamente las experiencias eran muy traumáticas porque el dolor era muy fuerte y no había alternativas de anestesia o analgesia, que acompañen el procedimiento", relató la entrevistada.
"Nosotras creemos que es importante traer esto a la Argentina, pero primero necesitamos conocer cómo es nuestra experiencia acá, por eso el relevamiento es para todas las personas, para las que tuvieron buenas y malas experiencias, porque necesitamos saber qué está pasando en nuestro país", finalizó.