Este jueves 29 de abril, se sustanció un acuerdo de reparación integral, prevista en el Código Procesal Penal, ofrecida por Federico José Roldán Vázquez y Alfredo Iramaín, quienes enfrentaban una causa por violación a las restricciones impuestas por las autoridades en el marco de la pandemia de Covid-19, agresión y resistencia de la autoridad.
Dicha reparación, establecida bajo los criterios de oportunidad que establece la ley, fue aceptada por el Fiscal de la Unidad de Decisión Temprana de la capital, Marcelo Leguizamón. La misma consistió en un resarcimiento económico que afrontaron los acusados que hicieron efectiva la compra de tres computadoras totalmente equipadas, por un valor de $200.000, que fueron cedidas a la comisaría séptima.
Los jóvenes habían sido imputados por el Ministerio Fiscal luego de haber sido detenidos en la madrugada del domingo 26, tras protagonizar un enfrentamiento con personal policial de la comisaría séptima que se encontraba haciendo controles en una fiesta. Además de la compra de los equipos, el acuerdo incluyó un pedido de disculpas hacia los uniformados.
Tras los hechos que se le imputaron, las autoridades del Tribunal de Cuentas dispusieron iniciar un sumario administrativo contra el contador fiscal Alfredo Hilario Iramaín. Además, según consta en la resolución 261 del organismo provincial, Iramaín (quien también desempeña funciones como delegado fiscal en el Ministerio de Seguridad) fue suspendido por 30 días en el cumplimiento de sus funciones.
Por su parte, la Corte Suprema de Justicia resolvió que el funcionario aprehendido afectado a su ámbito (forma parte del Cuerpo de Auditores), Federico José Roldán Vázquez, también sea investigado y, eventualmente, sancionado.
El hecho
Iramaín y Vázquez, ambos de 33 años, fueron detenido en la madrugada del domingo pasado luego de que uno de ellos se peleara con el comisario Walter Colombres, que trabaja en la Seccional Séptima y en ese momento dirigía un operativo por una fiesta clandestina al oeste de la Capital. Según lo que detalla el informe policial, cuando los policías llegaron al lugar había cerca de 15 vehículos alrededor de una vivienda, en calle Cayetano Rodríguez primera cuadra. De inmediato, Colombres se acercó a la puerta solicitando a los presentes que bajaran la música y se retiraran del lugar ya que no podían seguir allí en virtud de las restricciones sanitarias vigentes a raíz de la pandemia.
Lejos de acatar las órdenes policiales, Vázquez comenzó a discutir con el comisario a tal punto que luego se tranzaron a golpes. Luego fue detenido, hecho que quiso ser impedido por Iramaín, según consta en el parte policial. Como corolario, los dos hombres terminaron detenidos luego de provocar gritos y disturbios ante el personal policial, quien necesito solicitar refuerzo.