El Primer Mandatario destacó la importancia de eficiencia en el manejo de los recursos público. "Desde el primer día nos propusimos un plan de total austeridad, priorizando la inversión en áreas críticas para el desarrollo de la provincia", afirmó y añadió: "Hemos tomado decisiones difíciles pero necesarias para garantizar el bienestar de los tucumanos y el buen funcionamiento del gobierno".
El mandatario resaltó que, a pesar de las dificultades, la provincia ha logrado mantener la estabilidad financiera y cumplir con sus compromisos presupuestarios, incluido el pago puntual de salarios. "Estamos trabajando incansablemente para garantizar los servicios básicos, el funcionamiento de los hospitales y el fortalecimiento de la seguridad, especialmente en la lucha contra el narcotráfico y la delincuencia", agregó.
En esa línea, el Gobernador también anunció planes para mejorar la infraestructura escolar y continuar el diálogo constructivo con los sindicatos. "En tiempos de crisis a nivel nacional, Tucumán está en camino, bien administrado y con paz social", aseguró. "Estamos cumpliendo con nuestras responsabilidades para cumplir con todos los tucumanos".
Jaldo también hizo un llamado al trabajo conjunto y al esfuerzo continuo de todos los funcionarios para mantener el rumbo y superar los desafíos presentes. "Nuestra administración está comprometida en seguir trabajando con dedicación y responsabilidad para cumplir con las expectativas de los tucumanos", aseguró.
Obras Públicas
En cuanto a la situación de la obra pública en la provincia, el Gobernador destacó la necesidad de declarar una emergencia que abarque diversos aspectos legales, financieros y edilicios. “Esta medida permitirá renegociar contratos de obras afectadas por la falta de recursos, así como agilizar los procesos de ejecución de proyectos importantes para la comunidad, como la finalización de la política carcelaria y la construcción de infraestructuras educativas”, sostuvo.
Con respecto a la nueva ley que se está impulsando en la Legislatura provincial, el Primer Mandatario aclaró que no implica que la provincia se haga cargo de obras nacionales ni de los pagos correspondientes al gobierno central. “Nos autoriza a que hagamos préstamos o que paguemos a cuenta de futuros certificados nacionales; a que cuando lleguen los recursos, la provincia retiene y la provincia recupera. Bajo ningún punto de vista estamos poniendo recursos de carácter definitivo a obras que tienen fondos de origen nacional ni internacional, o sea, que a la plata de los tucumanos es para los tucumanos”, afirmó.
Y enfatizó que la ley permitirá adelantar pagos sobre certificados aprobados a nivel nacional, siempre y cuando la provincia tenga la capacidad financiera para hacerlo: “Si hay obras que se nos están demorando como la cárcel por ejemplo y hay certificados aprobados a nivel nacional, por montos importantes, que con eso nosotros podemos empezar a terminar los tres primeros pabellones; si Tucumán puede hacer un anticipo de esos certificados que están aprobados y que los recursos en algún momento van a llegar y la provincia tiene cómo hacerlo, la ley no va a facultar para que pongamos los recursos, cuando llegue la plata del certificado, la provincia descuenta, es decir, que no lo paga Tucumán”.