Fuentes judiciales informaron a Infobae que Gorini iba a estar la semana que viene por una licencia que solicitó y se le concedió tiempo atrás cuando el tema de Vialidad no estaba en agenda. Las fuentes consultadas señalaron que la licencia era “por motivos personales”, sin ahondar en detalles, y para viajar a España. Sin embargo, luego de que esta mañana se difundiera públicamente la noticia del viaje, el juez buscó postergar su licencia, lo que finalmente concretó.
Así, Gorini continuará como el juez de ejecución de la condena de Cristina Kirchner y el resto de los acusados. Si no, su lugar iba a ser ocupado para esa función por Rodrigo Giménez Uriburu, también juez del mismo tribunal oral. Los tribunales orales tienen tres jueces. En este caso son solo dos porque el tercer lugar está vacante, que siempre se cubre con un suplente. Para el caso Vialidad es Andrés Basso.
Giménez Uriburu es uno de los jueces apuntados tiempo atrás por Cristina Kirchner por integrar el equipo de fútbol Liverpool, que integran otros magistrados y participó de un campeonato en la quinta del ex presidente Mauricio Macri.
En los casos de ejecuciones de sentencias las decisiones son de un solo juez. En este caso es Gorini pero ante su posible ausencia quien lo reemplazará es Giménez Uriburu. Más allá de eso, las fuentes señalan que por la trascendencia del caso de Vialidad aunque firme un solo juez la decisión es consentida por todo el tribunal.
La ausencia del juez se iba a dar la semana en la que Cristina Kirchner y el resto de los acusados tienen que presentarse en los tribunales de Comodoro Py para quedar detenidos. El tribunal les dio un plazo de cinco días hábiles que vence el próximo miércoles. Además, respecto de la ex presidenta se tiene que resolver el pedido de prisión domiciliaria.
La defensa de la ex mandataria alegó tres motivos principales para pedir la detención domiciliaria: su rol como ex presidenta que requiere una especial seguridad, su intento de homicidio en 2022 y su edad, 72 años.
“Resulta incontrovertible que en el caso de Cristina Fernández de Kirchner, el cumplimiento de una pena privativa de libertad sólo puede ser llevado a cabo bajo la modalidad de detención domiciliaria. Ello así, pues su alojamiento en una institución carcelaria de manera alguna es compatible con los recaudos de seguridad que deben serle garantizados a una persona que se encuentra en la situación de nuestra asistida”, sostuvieron los abogados que también reclamaron que a Cristina Kirchner no se le coloque una tobillera electrónica.