La Cámara de Senadores de Entre Ríos aprobó y convirtió en ley el proyecto por el que se crea el régimen para el acceso seguro e informado al cannabis con fines médicos, terapéuticos y/o paliativos del dolor y a sus derivados, que busca "garantizar y promover la protección integral de la salud de las personas" que la necesiten. En contacto con LV12 Radio Independencia, Guillermina Ferraris, integrante de APAC (Agrupación Paranaense de Agricultores Cannábicos), explicó cuales son los alcances de la norma.
“Es una ley que viene a ampliar derechos, y que los amplia por encima de lo que plantea la norma nacional. Entre Ríos es la primera provincia en tener una ley propia, que agrega varios condimentos que permiten democratizar las vías de acceso a la planta de marihuana, a través del autocultivo, cultivo solidario o cultivo agrupado”, comenzó diciendo.
“A través de una asociación civil con personería jurídica, APAC está por presentar el estatuto, lo que nos permitirá proveerle la planta o el preparado a las personas que la necesiten sin tener conflictos con la ley”, agregó.
En este marco, recordó que la ley de estupefacientes “sigue persiguiendo la comercialización del cannabis, por eso es importante esta norma que regula el acceso para que la personas no tengan que someterse a la clandestinidad para comprar una planta o aceite que requiere para un tratamiento”.
Entre las mejoras que la ley entrerriana aporta a la ley nacional, Ferraris destacó que el proyecto nacional fija como límite las 9 plantas florecidas. En cambio, la norma entrerriana no establece un límite. “Logramos que se elimine ese obstáculo, que permite que se pueda cultivar sin límites y en 3 domicilios en simultáneo”, señaló.
Otro punto interesante de la norma es que garantiza los testeos cromatográficos de manera gratuita. Consultada al respecto, Ferraris contó que se trata de “un estudio que permite analizar los componentes del aceite que estas por tomar, que es muy útil para que todo aquel que no lo cultiva puede saber si le vendieron algo bueno. Hoy en día ese estudio es muy caro. Logramos que sea entendido como un derecho y no como una obligación”.
“Es importante señalar que no hay ninguna muerte registrada por consumo de cannabis, porque básicamente no tiene ningún riesgo su consumo”.
En otro de sus artículos, la ley prohíbe que las sociedades comerciales y laboratorios privados puedan participar del cultivo. Para Ferraris esto fue un “gran acierto” porque “viene a fortalecer las economía regionales y populares y darles prioridad a los pequeños productores”.
“La norma busca garantizar que aquellos productores que lo hacen hace mucho tiempo tengan la posibilidad de que puedan continuar en esto y que no quede a las buenas de la mano invisible del mercado. Además, no se puede incluir en una ley que viene a garantizar derechos a la salud, todas las cuestiones que tienen que ver con el ámbito productivo-comercial. Eso requiere una ley aparte”, sentenció.