La reunión se produjo luego de que Fassi protagonizara una polémica conferencia de prensa donde criticó duramente a la casa madre del fútbol argentino tras un cuestionado arbitraje de Andrés Merlos en el partido entre Talleres y Boca por la Copa Argentina.
Este incidente detonó una guerra declarada contra Tapia, que ya venía gestándose debido a la oposición de Fassi al manejo de la entidad y su apoyo a la implementación de las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) en el fútbol argentino, un proyecto que también es respaldado por Milei.
Durante el encuentro, ambos dirigentes intercambiaron camisetas en un gesto que refleja la sintonía entre Fassi y el líder libertario. A través de esta foto, el mandatario de la T refuerza su alejamiento de Tapia y sus aliados, mientras que Milei deja claro que su Gobierno apoya un cambio estructural en el fútbol nacional.
El proyecto de las SAD y el apoyo del Gobierno
La propuesta de transformar los clubes en Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) es un punto de unión entre Milei y Fassi. Este proyecto busca abrir el fútbol argentino al mercado de inversiones y modernizar su estructura, una visión que los pone en la vereda opuesta a Tapia y la mayoría de los clubes, que rechazan esta transformación.
Tras la reunión, Talleres emitió un comunicado en el que destacó los principales temas discutidos durante la conversación. Según el texto, ambos coincidieron en la necesidad de "salvar el fútbol argentino" y transformarlo en una actividad capaz de generar valor social, deportivo, cultural y económico.
La visión compartida es alinear la Liga local con las principales ligas europeas, como la inglesa, francesa, española, italiana y alemana, donde se forman los grandes jugadores que han convertido a Argentina en campeón del mundo.
El comunicado también menciona la importancia de una "reconstrucción" del fútbol argentino, planteando una estrategia para fortalecerlo en todos los niveles, lo que incluye la posibilidad de abrir el deporte a nuevas inversiones y modelos de gestión.