El 13 de julio se conmemoró el Día Mundial del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), una fecha clave para visibilizar esta condición neurobiológica que afecta a millones de niños, adolescentes y adultos en todo el mundo.
La jornada busca promover el diagnóstico temprano, el acceso a tratamientos adecuados y combatir los prejuicios que aún persisten en la sociedad.
¿Qué es el TDAH?
"Es un trastorno bastante visible y tiene un déficit atencional. Cuando decimos esto nos referimos a algo que no podemos hacer en nuestra vida cotidiana, rendir y ser funcional. Esto tiene que ver con poder estar atentos y concentrados en nuestras actividades diarias. Necesitamos una atención sostenida y esto no sucede cuando está este trastorno", explicó en LV12, Melina González Paulos, especialista en Desarrollo Infantil.
Además, "hay un hiperactividad de fondo que tampoco nos permite estar en estos períodos de concentración y atención sostenidos".
¿Cómo se diagnostica?
Para la licenciada "lo ideal es que sea de forma interdisciplinaria, no que sea un solo profesional el que llegue a este diagnóstico sino varios para poder establecer en conjunto que estamos hablando de un déficit de atención e hiperactividad".
Esto profesionales pueden ser psicopedagogos, pediatras, terapeutas infantiles y dependiendo del caso del área de la psiquiatría y psicología. "Un diagnóstico puede estar en muchas personas pero cada una tiene necesidades particulares y distintas".
En cuanto a recomendaciones, indicó: "Cuando tenemos un niño de 3 años (todo depende de la edad y etapa del desarrollo) que no logra iniciar o terminar una actividad: Por ejemplo, si estamos cocinando y nos quiere ayudar, le decimos poné esos pedacitos de queso y si pone 1 o 2 y se tira de la silla y se baja a agarrar otra cosa, en cuestión de 5 minutos, quizá tenemos algo que atender a ver cómo podemos ordenarlos".
Les cuesta seguir consignas muy largas
Por último, la especialista en vínculo materno-infantil, expresó que "el adulto da muchas cosas por sentado. Entonces si les decimos poné ese pedacito de queso y vamos a buscar a la cuchara para revolver la salsa, ese niño se perdió. Nosotros seguimos hablando con consignas largas pero deben ser más cortas y concretas, sosteniendo a ese niño de los hombros y con contacto visual".