DEPORTES | Bayern Múnich |

Si es Bayern (Múnich), es bueno: un campeón temible

Bayern Múnich ganó todos los partidos en esta Champions League: despachó al Chelsea, le metió ocho al Barcelona de Messi y dejó sin trono al PSG de Neymar.

Once partidos jugados, once partidos ganados. 43 goles a favor y tan solo ocho en contra. La estadística marca un número que impresiona: casi cuatro goles por partido de promedio (3,90 exactamente). En seis duelos mantuvo la valla invicta. En posesión de pelota promedió 64% sumando todos los encuentros disputados. Le hizo seis goles al Estrella Roja, siete al Tottenham y ocho al Barcelona de Messi. Robert Lewandowski fue el goleador del equipo y del torneo: 15 gritos. Insuperable. Fantástico. Imponente. Después de repasar algunos números del Bayern Múnich ¿se entiende porqué fue el mejor de la Champions League?. No quedan dudas.

Este equipo que moldeó el entrenador Hans-Dieter Flick tiene impregnado el gen alemán: mentalidad ganadora 100%. Tuvo un paso arrollador por esta Champions League, que quedará en la historia por el contexto mundial de la pandemia de Covid-19. Testeos, protocolo, distanciamiento, estadios sin público, pero con un campeón que brilló en todos los aspectos.

El Bayer Múnich, además, logró la triple corona. Festejó en la Bundesliga, en la Copa de Alemania y se quedó con la "orejona". Es la sexta en su historia. Uno de los clubes más ganadores a nivel local y a nivel europeo.

image.png
Festejo merecido en la Champions League para el Bayern Múnich.

Festejo merecido en la Champions League para el Bayern Múnich.

El paso por esta Champions fue descomunal. La fase de grupos la ganó caminando teniendo como rivales al Tottenham, Estrella Roja y el Olympiakos. Metío seis de seis, puntaje perfecto con 24 goles a favor y tan solo cinco en contra.

En la fase eliminatoria, tuvo que enfrentar a rivales difíciles e históricos. Pero nada pudo con este Bayern. Paseó al Chelsea ganándole en Alemania e Inglaterra (7 a 1 el global). Y después con el nuevo formato a partido único, se llevó puesto al Barcelona de Messi, con baile incluido. Fue 8 a 2. Sí, tremendo, pero indiscutiblemente real. Y cómo si fuera poco, con la goleada, generó una hecatombe a tal punto que se habla del adiós de Lionel Messi a los catalanes. ¿Messi sin Barcelona o Barcelona sin Messi?. El super Bayer fabricó esa incógnita. En semis apareció el Lyon, pero los bávaros, sin despeinarse, barrieron a los franceses con un 3 a 0 para meterse en la final número 11 de su historia y para....que pase el que sigue!!!.

En el partido decisivo Neymar, Mbappé y Di María esperaban del otro lado para frenar a la topadora alemana. ¿Pudieron?. La respuesta es no. El Bayern Múnich se plantó con esa frialdad admirable en la cancha, fue trabajando el partido, y a pesar que el PSG tuvo chances de marcar, siempre estaba latente que los alemanes iban a golpear y eso sería mortal. Y así fue. El cabezazo de Kingsley Coman, que nació físicamente y futbolísticamente en Paris, derribó el sueño de levantar la copa por primera vez al poderoso equipo de la capital francesa. Fin de la historia en Lisboa. El Bayern comenzó a ganar la Champions desde el minuto cero del primer partido de fase de grupos. Dominó todo, conquistó todo y sacó de escenario a cualquiera que hubiera tenido la osadía de enfrentarlo. La soñaron y la buscaron todos (Ronaldo. Messi, Neymar) pero la copa siempre tuvo un dueño.

image.png
Coman tras marcar el gol que le dio el título de Champions League al Bayern Múnich.

Coman tras marcar el gol que le dio el título de Champions League al Bayern Múnich.

¿Claves del campeón?. Un arquero como Manuel Neuer, que curiosamente ataja más con los pies que con las manos (en la final sacó tres pelotas con esa modalidad). Una defensa firme que tiene a Boateng y Alaba como estandartes. Con Thiago Alcántara mandando en el medio. Y como si todo lo anterior fuera poco, el Bayern cuenta con dos torres tremendamente temibles: Thomas Müller y Robert Lewandowski...¿quién no los elegirías para su equipo en el picadito de barrio?. Un equipo sin fórmulas mágicas. Presionar, recuperar y atacar, siempre atacar. Parece fácil, sencillo, o no tanto. Para el Bayern sí, porque entiende de qué se trata esto de jugar a la pelota.

Se fue una nueva Champions League y siempre es bueno recordar la frase del goleador inglés Gary Lineker, que define la potencia del fútbol germano: “el fútbol es un deporte que inventaron los ingleses, juegan 11 contra 11 y siempre ganan los alemanes”. La descripción perfecta del título que quedó en manos de quién se lo merecía: el Bayern Múnich.

image.png
La

La "orejona" quedó en manos del Bayern Múnich. La Champions League tiene nuevo dueño.

Dejá tu comentario