La iniciativa fusiona varias propuestas similares que se presentaron ante el Parlamento, y es impulsada por la senadora Joanna Pérez, del Partido Demócrata Cristiano, que manifestó su confianza en que se pueda aplicar la nueva norma este mismo año.
En Chile el voto es voluntario desde 2012, a partir de una ley aprobada durante el primer gobierno de Sebastián Piñera. Pero desde entonces la participación en las elecciones se ha mantenido en porcentajes bajos, que preocupan a los legisladores y motivan los llamados a volver a la obligatoriedad.
Descenso
El proyecto que está en proceso de aprobación establece el voto obligatorio para las distintas elecciones de cargos, pero no para las primarias de los partidos, en las que se mantiene la participación voluntaria. No establece una sanción para quien no vote, y ese fue un motivo de críticas al texto.
Según recordó el diario La Tercera, en las municipales de 2012 la abstención llegó a 57% y en las de 2016 subió a 65,1%. En las presidenciales de 2013 y 2017 superó por poco el 50 por ciento.