Acortaron a 14 dias la extensión de la preventiva, dia en que vence la misma y para así elevar a juicio al principal imputado. Las pruebas de ADN y junta médica serían contundentes contra el implicado.
Este lunes se desarrolló una nueva audiencia en el marco de la causa por el asesinato de Antonio del Carmen Olivera (63), el ladrillero que fue estrangulado cuando pretendían sustraerle pertenencias en su vivienda. La Unidad Fiscal de Homicidios II, dirigida por Carlos Sale, imputó a Soledad Daiana Bustos, de 24 años, quien ya fue condenada en un juicio abreviado a una pena condicional (por el robo); y a Roberto Carlos Lazarte, alias “Pegamadre”, al que se le atribuye ser presunto autor del delito calificado homicidio en ocasión de robo. El brutal episodio tuvo lugar el 29 de febrero pasado, en una zona rural de Alderetes.
“Aún se encuentran firmes los riesgos procesales de peligro de fuga y obstaculización de la investigación”, sostuvo la auxiliar de fiscal, Luz Becerra, al momento de requerir que se prolongue la prisión preventiva que viene cumpliendo Lazarte hace seis meses. “Voy a pedir una prórroga corta, de 14 días (hasta el 14 de octubre). Ese día se vence la investigación penal preparatoria y para tal fecha evaluaremos si se puede hacer o no el (juicio) abreviado, de lo contrario se hará el requerimiento de apertura a juicio (oral y público)”.
Sin oposición de la defensa técnica, el juez interviniente resolvió aceptar lo demandado por el MPF.
Evidencias claves
“Bustos lo señaló específicamente a Lazarte, y describió la mecánica y la modalidad de cómo ocurrió el hecho. Si no prospera el abreviado y tenemos que hacer el requerimiento de apertura a juicio, ella será ofrecida para declarar en el debate, por eso es necesario proteger su testimonio”, afirmó la investigadora.
Asimismo, cabe mencionar que una muestra de ADN al acusado arrojó resultado positivo, ya que su perfil genético fue hallado en el cable con el que fue ahorcada la víctima.
Por otro lado, semanas atrás se realizó una Junta Médica por pedido de la madre de Lazarte, quien refería que él contaba con un certificado de discapacidad. Dicha Junta se realizó en el Hospital Obarrio y determinó que el imputado sí puede comprender la criminalidad de sus actos y es capaz de dirigir sus acciones.
La teoría de la Fiscalía
El 29 de febrero de 2024, cerca de la 19:00 horas, Bustos y Lazarte se dirigieron a la vivienda de Olivera (ubicada en Finca de Daguero, Camino al Cochuchal, altura avenida Independencia al 2500, zona rural de Alderetes), a quien conocían con anterioridad, con intenciones de pedirle dinero o mercaderías. Ya en el lugar, y ante la negativa de la víctima de brindarles ayuda, fue que ambos, con intenciones de sustraerle ilegítimamente algunas de sus pertenencias, desconectaron una garrafa de gas y levantaron dos palas que tenía Olivera en su domicilio.
Esto ocasionó que se opusiera, trenzándose en lucha con Lazarte, quien con intenciones de causarle la muerte tomó un cable con cinta de embalar (de aproximadamente 60 cm) y estranguló a la víctima, causándole la muerte por asfixia mecánica por estrangulación. El agresor y Bustos se dieron a la fuga con los elementos mencionados. El cuerpo fue hallado al día siguiente, el 1º de marzo.