Según consta en el informe policial, al momento de ir a dormir, el hombre quiso tener relaciones sexuales con su mujer, y ésta se negó, lo que motivó la reacción violenta del mismo, levantándola de la cama y de los pelos, propinándole un golpe de puño.
La víctima se defendió mordiéndole el dedo y ahogando al sujeto para que dejara de golpearla, pero este logro darle otro golpe de puño y también logró golpearla en la pierna y el brazo con la parte de fierro de un látigo trenzado.
Finalmente, la mujer logró escaparse con sus cuatro hijos y se fue a la casa de su madre. La mujer manifestó que hace 16 años que convive con esta persona y que siempre sufrió ataques de celos y posesión y que no es la primera vez que la golpea. El sujeto quedó detenido.