El técnico se mostró sincero sobre su presente personal: “Disfrutando de mi hija, de compartir con ella las cosas que me iba perdiendo por trabajar en Argentina, asi que me vino el descanso pero con ganas de volver a vivir esos momentos lindos que vivimos los entrenadores”
Campeón como jugador, y campeón como entrenador, le dio un plus al básquet albirrojo. Más allá que no pudo coronar ante Boca aseguró que “fue una decisión difícil, pero dejo Instituto en el mejor momento, estábamos viviendo deportiva muy buena, el amor de la gente, la final pasada con Boca fue muy nueva pero son decisiones que me toca tomar y yo quise estar cerca de mi hija y conectarme con ella, dándole más importancia a liberar un poco la cabeza para próximos retos que se me presenten”.
“Me siento capacitado para dirigir cualquier equipo"
Con su experiencia en Argentina y en Europa, no descarta volver a dirigir en el más alto nivel: “Me siento capacitado para dirigir cualquier equipo. Todo necesita su tiempo, el hecho que yo haya sido jugador no me garantiza hacer las cosa bien como entrenador. Tuve ocho años de argentina que fueron espectaculares y hoy me hizo un entrenador más completo y ojala me vengan retos más increíbles y emocionantes. Soy un privilegiado que todas las temporadas me fue bien, analizar que tengo por mejorar y en eso estoy enfocado”, señaló.
Finalmente, analizó el presente del básquet argentino:“Es un momento difícil para obtener resultados rápidos. Tienen que tener posibilidad de trabajar e ir viendo la evolución, por la Argentina se le pide estar arriba pero la realidad del jugador y la parte competitiva del mundo no parece que estemos entre los mejores, hay que buscar un lugar para que se pueda defender”, cerró.