Mientras el consumo de carne vacuna está en el nivel más bajo de los últimos 28 años, después de más de siete meses sin subas, el pollo es el favorito en lo que va del año.
En diálogo con LV12 Radio Independencia, Roberto Domenech, presidente de CEPA, señaló: "Se han dado las dos cosas en los últimos 6 o 7 años. Por un lado, la exportación de la carne bovina ha generado una menor oferta en el mercado y se ha trasladado a un precio más alto y por otro lado, se ha dado el crecimiento de la producción de pollo. Hoy estamos con volúmenes de producción del orden de los 2.500.000 toneladas en el año, un número altísimo".
Y continuó: "Estamos satisfechos con esta diversificación del consumo, yo creo que eso es lo más rescatable de esto. Todos nos beneficiamos con la producción de carnes en Argentina, que es muy importante, que tiene condiciones naturales como los elementos básicos, el alimento balanceado, la producción de maíz, la disponibilidad de soja y todo eso con un antecedente histórico del reconocimiento de la carne bobina argentina en el mundo".
Se ha diversificado el consumo de las tres carnes, quedando las carne bovina según manifiestan las diversas cámaras entre los 43 y 44 kilos por habitante al año, la de pollo entre 47 y 48 kilos y la del cerdo en 20 y 21 kilos. O sea, hay algo que es sumamente positivo para el país en todos los ordenes, para la población que le permite tener acceso a la carne más cara, a la intermedia que sería el cerdo y a la más económica que es la del pollo que se da acá y se da en el mundo entero.
"Po otro lado, nos permite mandar al mundo un producto de excepción como es la carne bovina, un producto que viene creciendo en la exportación, pero lamentablemente el año pasado tuvimos que aceptar estar cerrados casi 7 meses producto del pasaje de la influenza aviar que hubo en Argentina y en Sudamérica", añadió.
Crece la venta de alitas de pollo, menudos y carcazas
En entrevistado aseguró que todos los cortes de pollo se venden por igual: "En realidad no tiene tantos cortes el pollo, salvo que uno lo clasifique sin hueso, sin piel, con piel, con hueso, pero la forma es la pechuga que es con piel o con hueso, sin piel o sin hueso, que ya ahí se convierte en la suprema".
Ese es el producto de mayor precio y el de mayor demanda, que luego se transforma en la mayoría de las pollerías y carnicerías en milanesa de pollo.
"La pata muslo también tiene mucha salida. En general es un producto que va con hueso y con piel, va muy bien para la parilla, va muy bien para el horno también y otro producto que va ganando espacio como consecuencia que en las pollerías el mismo propietario troza y corta el pollo, son las alitas", enfatizó.
"Hasta ahora ha sido un producto de oferta permanente, como un remanente que quisiera de alguna manera canalizar, al igual que la carcaza y los menudos, pero en el caso de las alitas, el consumidor evidentemente está encontrándoles un lugar, está reconociendo lo sabrosas que son y que se las puede hacer de distinta manera", finalizó.