Una de las áreas fundamentales que se desempeña desde hace ya cinco meses a destajo para aportar al cese de las consecuencias sanitarias de la pandemia es la del personal a cargo de la vacunación histórica contra el coronavirus. Francisco Barreiro, titular de la Dirección de Emergencias 107, hizo referencia a un balance en el marco del reciente megaoperativo lanzado en la capital tucumana durante el fin de semana.
En comunicación con LV12 Radio Independencia, el referente del 107 explicó: "no es fácil venir vacunando desde el 29 de diciembre con el personal, que es lo mismo que en la atención en los hospitales, sigue siendo el mismo personal que está vacunando más de 12 horas por día, no solamente siempre es amable la atención sino que también hay tipos de situaciones de personas que vienen a exigir, por ejemplo, la segunda dosis y hay que hacerles entender, se suma un desgaste".
"Me gusta referirme al gran trabajo que están haciendo todos los nodos en donde estamos expuestos también a contagios, porque llegamos a vacunar a más de 300 mil personas y alguna de ellas vino a vacunarse a veces con Covid-19 positivo, no lo sabían y no lo referían. Gracias a Dios no hemos tenido alto nivel de contagios y venimos resolviendo bien la situación"
"En la mayor parte de las situaciones, la gente sale muy agradecida, con mucha esperanza, luego de haber estado ansiosos tanto tiempo, una vez que lo logran salen felices porque les da una esperanza y una sensación de un poco más de libertad para hacer algunas cosas, aunque siempre repetimos que tienen que seguir cuidándose", sostuvo a continuación Barreiro.
El titular del servicio del 107 reconoció además de que "se reconvirtieron médicos en enfermeros, personal sanitario y de limpieza, hubo que adaptarse a la situación, lo nuestro es el traslado de pacientes críticos y sospechosos que fueron siendo más cantidad. En marzo, donde no teníamos declarada tanta cantidad de casos, tantas situaciones, que en la Dirección de emergencia hicimos 378 pacientes con Covid-19 o sospecha; en mayo, del 1 al 24, hicimos 1.164 traslado de pacientes de iguales características, hay edades mucho menores que en la primera ola".
"Tenemos a veces dificultad en el traslado para conseguir camas, pero se las consigue. Se los contiene en el hospital hasta que podamos entregarlos en las mejores condiciones, tratamos de no llevar pacientes muy críticos sin destino porque el estar parado dos o tres horas no es bueno para él, ni para nosotros"
"Hasta ahora no tenemos la necesidad de tener pacientes y dejarlos morir en algún lugar como ocurrió en Rosario o Córdoba, todavía no decidimos quien vive o quien muere, tratamos de brindar una atención dentro de las posibilidades", finalizó en torno a la posible saturación de las camas críticas en el sistema sanitario de la provincia.