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La comunidad wichi tiene su exponente en tecnología

Mario Maximiliano Martínez es un estudiante de 17 años, candidato a un premio mundial de la Unesco: explicó en LV12 el desarrollo de su aplicación traductora.

El estudiante de la comunidad originaria wichi de General Enrique Mosconi (Salta), Mario Maximiliano Sánchez, fue seleccionado para participar por un importante premio mundial que otorga Unesco en reconocimiento a los alumnos.

Luego de enterarse de la noticia, Maxi, de 17 años, encabezó este jueves una caravana organizada las autoridades locales y con el apoyo de Bomberos, Gendarmería y la Policía de General Mosconi. También participó de actos y homenajes por toda la ciudad.

El adolescente camina una hora a diario para cursar sus estudios en la Escuela de Comercio 5.005 Juan XXIII. Pero este jueves recibió la mejor noticia: había sido nominado por la Fundación Varkey y la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) para el Global Student Prize 2021, un premio para “un estudiante excepcional, que tiene un impacto real en el aprendizaje, la vida de sus compañeros y en la sociedad”.

Mario Maximiliano Sánchez

El joven emprendedor de la comunidad wichi manifestó en comunicación con LV12 Radio Independencia los detalles del proyecto que lo catapultó al reconocimiento internacional: "estoy ahora con este proyecto de una aplicación que traduce del español al wichi, que aún no lo termino. La idea surge porque hay mucha gente que no entiende ambos idiomas, por ejemplo al hacer trámites".

"Estoy desarrollándola con bases para que no tenga necesidad de tener una conexión a internet. Anteriormente con el inicio de la pandemia no tenía computadoras ni nada por el estilo, una vez que gané un premio por lengua y literatura, un periodista me entrevistó y al no tener nada, se comunicó con alguien y ahí surgió una persona que me regaló un celular para trabajar", reconoció el joven de la comunidad wichi sobre sus posibilidades.

Maxi dijo que "esta app fue creada anteriormente pero la restauré con algunas otras funciones" además de manifestar las condiciones en las que debe desarrollarse para poder concretar sus cometidos: "la escuela queda a 3 kilómetros de mi casa y voy caminando, todos los días, a veces cuando llueve o pasa algo intento ir".

"Mi familia está feliz, mi abuela que me crió desde los 4 años está feliz, también las personas que me ayudan desde el ciclo lectivo, Eva Fernández, que cuando ingresé a la secundaria en primer año la conocí, es una profesora de matemática, se jubiló y aún jubilada me seguía ayudando", indicó con respecto a las repercusiones de su logro.

Además de tener claros sus conocimientos tecnológicos, sabe de las condiciones precarias del resto de sus comunitarios wichis: "muchos chicos dejaron la escuela, 98 chicos quieren estudiar y no pueden por distancia e incomodidad, son chicos de 16, 17 y 18, algunos se dedicaron al mal camino como el consumo de drogas".

Ligado a esa problemática social, sabe cómo direccionar el posible premio, en caso de ganar ante la UNESCO, de 100 mil dólares: "el 50% lo llevaría a todo mi pueblo, algún proyecto que beneficie a todos los chicos, mi comunidad y el resto de las comunidades. El otro 50% lo quiero invertir en un negocio de técnica de celulares, tengo ideas para hacerlo, invirtiendo y si gano más seguiría ayudando a toda mi comunidad".

FUENTE: Con información de La Voz

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