En declaraciones realizadas este sábado junto al ministro de Justicia y Seguridad porteño, Waldo Wolff, la ministra de Seguridad de la Nación aseguró que "Argentina necesita un orden en la seguridad pública y en la calle".
Dijo que se implementó "un operativo de despeje de las calles, de cuidado del parlamento" aunque reconoció que "hubo un pequeño momento de tensión" pero que igualmente "el objetivo está totalmente logrado", reiteró.
La ministra aseguró que el operativo “no fue desmesurado” y tuvo la dimensión necesaria para que “las fuerzas de seguridad tengan el control” del espacio público. “Si las fuerzas de seguridad no tienen el control, terminamos en un desastre”, apuntó.
Y se preguntó: “¿Ayer (por el viernes) hubo algún manifestante herido, que tuviera problemas?”, e indicó que “hubo una persona que fue herida en otro hecho, en un robo en otra parte, y apareció en la plaza con una herida, pero no fue golpeado por la policía”.
Sobre los más de 25 periodistas que resultaron heridos por las fuerzas de seguridad federal, Bullrich dijo que van a convocar a organizaciones del sector para establecer un “protocolo” para los periodistas y su trabajo.
Entre esas entidades mencionó a la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (Adepa) y el Foro de Periodismo Argentino (Fopea), para lograr que los trabajadores de prensa puedan ser identificados durante las protestas y movilizaciones.
"En un momento se discutió que el periodismo no esté entre la manifestación y las fuerzas de seguridad. Si están en el medio de la situación es muy difícil distinguirlos”, explicó.
En ese sentido, dijo que “sería bueno que el mismo periodismo, a través de sus organizaciones, porte un distintivo que diga ‘prensa’ y que tenga un lugar para que cuando haya una situación un poquito más tensa, las fuerzas de seguridad puedan saber perfectamente quién es quién"; es decir, a quién reprimir y a quién no.
Bullrich sostuvo que “en algunos países existen protocolos para el periodismo que en general trabajan por fuera de donde trabajan las fuerzas de seguridad, pero aquí nunca se avanzó en ese sentido porque se analiza como una falta de libertad de expresión”.